Terreno de juego
Otro intento fallido
Jesús Díaz Marcelo
Desde que era niño siempre te ví triunfando y sorprendiendo en fase de grupo, desde siempre
nos hacías ilusionarnos que podíamos pasar al quinto partido y para los que en verdad creemos
en tí pensábamos que ya casi era cuestión de partidos para tocar esa tan anhelada copa, que tu
figuras se estaban por ir a triunfar a Europa y que se convertirían en los más grandes de la
historia, tu afición cada cuatro años estaba vuelta loca porque sabíamos que ese sueño que
todos los que nos gusta esta pasión teníamos desde niños estaba más cerca de cumplirse.
Cuando le competimos a las figuras de Argentina con jugadores ya casi para retirarse y un joven
con el número 10 que era la promesa mundial, pero lamentablemente nuestro número 14 y
otros 10 no era capaz de combatir a árbitros que una vez más estaban en nuestra contra aliados
con la calidad de las 22 piernas argentinas y la rara inexperiencia de mexicanos más jóvenes y
más viejos de nuestra selección. Una nación estaba una vez más triste pero yo casi sin saber
este amor pensaba que solo era una mala pasada de nuestro tri.
Pasaron 4 años y nos enfrentamos a los europeos después de tantas copas del mundo, Holanda
era el siguiente rival en el partido del lema “no hay quinto malo” pero no terminamos ni con el
cuarto ya que por infinidad de ocasiones otra vez el arbitraje de la FIFA era el villano de este
nuevo fracaso junto con un zurdazo de Sneijder que nos dejaba de nueva cuenta con otro fracaso.
Te veía campeón cuando golpeaste a los bocones de Croacia pero no supiste aguantar el partido
y nos volvimos a quedar fuera de esas esperanza pero no había problema porque estaba
dispuesto a esperar cuatro años más.
En Rusia y una cita con los en aquel entonces campeón mundial nos hacían temblar las piernas
pero de emoción cuando ese gol del chucky Lozano nos hizo vibrar a por lo menos cien millones
de mexas, el sueño estaba intacto después de demostrar que con la máxima potencia mundial se
pudo. ¿Por qué no soñar con levantar la del mundo? porque existe ese maldito cuarto partido que
me han sacado más de una lágrima y han destrozado la ya poca esperanza que tengo por este
amor infinito. Brasil y el actor de Neymar eran los encargados de echarnos a la calle y de volar
hacia la CDMX. Mi ilusión estaba por los suelos pero creía que se estaba por hacer una excelente
preparación, vaya iluso.
Se contrataba un técnico con experiencia con equipos europeos y sudamericanos, con final de
Copa América y unos cuartos de final con una limitada selección paraguaya en 2010, dirigiendo
al Barcelona de Neymar, Suárez y Messi nos hacía soñar a todos. Los juegazos contra Estados
Unidos y la Copa Oro ganada a nuestro acérrimo rival mantenía fuerte esa esperanza por el
quinto partido en el país árabe pero una racha que pronto acababa con nuestro verdugo
Argentina nos hizo poner los pies sobre la tierra y se empezaba a pudrir todo junto con la
confianza al seleccionado nacional. No se producen jugadores y nuestra federación no hace
nada enterrando tres millones de metros bajo tierra con competencias mediocres y sistemas de
admisión que son imposibles de cubrir para os que en verdad tienen talento.
El fútbol nacional está en peligro y eso todos lo sabíamos cuando comenzó esta copa del mundo
pero ese niño de 10 años me decía que no me aguitara que como siempre la selección me tenía
una sorpresa pero vaya sorpresa que contra Polonia no se pudo sacar más de un punto, nos
regalamos contra Argentina y quisieron devolver la gloria en un partido queriendo arreglar lo que
no se hizo en un proceso de cuatro años, la mediocridad volvió a reinar pero ahora fuera de la
cancha, lo que más duele.
El dinero es lo más importante, la felicidad de ni el uno por ciento vale más que todos los que
tenemos pasión por este deporte y por 22 hombres pateando un balón, este como
lamentablemente toda nuestra historia es otro intento fallido.
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